En los últimos tiempos no paramos de ver un sinfín de argumentarios y estudios de diversas compañías que aseguran ser la mejor opción, o al menos una buena opción, para llegar a uno de los targets más buscados: el low viewer de televisión. El último seminario de Aedemo ha sido una buena muestra de ello.

Ante este hecho, me gustaría hacer algunas reflexiones. La primera es la importancia que se le sigue dando a la televisión en la planificación de las campañas. Sigue siendo central, los cimientos de la misma. Se da por hecho que al médium-high viewer de televisión se llega de forma más o menos sencilla con la campaña de televisión lineal y luego hay que completar la planificación con diversas opciones para llegar al low viewer y, de esta forma, lograr la mayor cobertura global posible.

Esta podría ser una segunda reflexión. En un mundo donde se ha puesto tan de moda la segmentación, incluso la personalización, parece ser que la cobertura global sigue siendo fundamental.

La tercera reflexión tiene que ver nuevamente con la cobertura. Los low viewer de televisión son perfectos para complementar la cobertura de una campaña global. Y desde luego que es así. Pero parece injusto quitar valor a la amplia cobertura conseguida previamente. Es habitual escuchar frases del tipo “una vez que llegas al 75% de cobertura, los 5 puntos finales los consigues mejor conmigo que tengo a los low viewers de televisión”.

Y seguro que es cierto, pero conseguir esos 75 puntos a los que se quitan todo el valor es algo, a día de hoy, imposible para todos menos para los grandes grupos de televisión. Quizás deberíamos empezar a decir “una vez que llegas al 30% de cobertura, los 50 puntos restantes los consigues sólo conmigo, y de manera muy eficiente”. En tiempos de tanta fragmentación, esa cobertura debería valorarse más.

Por último, puestos a llegar a los low viewer, nadie mejor que los grandes grupos televisivos para ello. Gracias a la apuesta por la tecnología Hbbtv y a la gran evolución de las televisiones conectadas, grupos como Atresmedia o Mediaset saben discriminar qué televisiones han sido o no impactados por una campaña determinada y, las impactadas, si ha sido muchas veces o pocas.

Una vez detectado esto, somos capaces de actuar digitalmente y lanzar publicidad a los low viewers de televisión bien en la televisión conectada, bien en nuestras propiedades digitales, convirtiéndonos en la opción más eficiente para encontrar a este target tan preciado.